Todos sabemos que es una buena cosa eso de mantener buenas relaciones con el vecindario, sobre todo si se vive con alguien puerta con puerta… pero creo que esto es demasiado. Sí, después de muchos años compartiendo la misma acera era de suponer que estas dos maduritas tetonas tendrían una relación cercana. Pero resultó que eso implicaba comerse los chochos y hasta correrse juntas, ¿cómo lo ves?
Y la cuestión es que ninguna de las dos se declaraba tortillera hasta hace poco, mira qué vueltas da la vida. Ahora, no quieren ni pensar en tener una pareja masculina, porque el sexo lesbico es todo lo que querían, y mucho más.