¿Puede una pasar 18 años pensando que le gustan los tíos, y en un minuto darse cuenta de que es una boyera convencida? Pues parece que sí, o al menos eso le ha pasado a esta chica latina. Tras ir de compras con su amiga, fuero a casa a probarse las prendas y ver cómo les quedaban con más tranquilidad. Y a pesar de que ella estaba desnuda, fue ver a su amiga pelirroja cambiándose de ropa lo que consiguió oponerla cachonda. Y la cosa llegó al extremo de que no pudo aguantarlo más, tuvo que quitarle a la otra chica la ropa a tirones, y meterse entre sus piernas para comerle el coño. Mientras, sentía cómo latía el suyo, al borde de un orgasmo.