Los padres de esta pelirroja pusieron el grito en el cielo cuando les dijo que iba a dedicarse a las fotos porno; vamos, que iba a ser fotógrafa erótica, no a posar. De todas formas, no les gustó nada, aunque la artista tortillera estaba encantada con su profesión. Pero, pasado el tiempo, se dio cuenta que estas sesiones de fotos eróticas tenían muchas ventajas; claro, si es que las hacía con modelos lesbianas. Porque tras tirar y tirar a estas chicas desnudas, todas espectaculares, lo normal es que acabaran cachondas perdidas. Y no es la primera vez que monta un trío con dos bellezas negras como estas…